Si estás buscando una pastelería en Madrid que combine calidad, encanto y una experiencia única, no busques más: Pastelería La 28 Cantabria es tu lugar. Ubicada en la Av. de Cantabria, 39, en el barrio de Alameda de Osuna, esta joya culinaria se ha ganado el corazón de locales y visitantes por igual.
Una experiencia gastronómica única
Desde el momento en que cruzas la puerta, te recibe un aroma irresistible a café recién hecho y a pasteles horneados. Los clientes habituales no pueden evitar sonreír cuando son recibidos por Beatriz y Luz, quienes siempre están listas para hacer tu visita memorable con su amabilidad y profesionalismo.
Delicias para todos los gustos
La variedad de productos en Pastelería La 28 Cantabria es impresionante. Desde los crujientes croissants hasta los roscones que parecen sacados de un sueño, cada bocado es una explosión de sabor. Los amantes del pan también encontrarán aquí su paraíso, con un pan que recuerda a los buenos tiempos, cuando cada rebanada tenía una historia que contar.
¿Te gustan las empanaditas? Las de espinaca con queso son simplemente irresistibles. Y si eres más de dulces, no te pierdas el pastel de chocolate o el pastelito de maracuyá. No importa lo que elijas, no podrás evitar desear tener un estómago más grande para probarlo todo.
Un lugar perfecto para cualquier momento del día
Además de sus exquisitos productos de panadería y pastelería, La 28 Cantabria es conocida por sus deliciosos desayunos. Desde tostadas y molletes salados hasta un café que, aunque alguna vez tuvo algún altibajo, sigue siendo una opción destacada en el barrio.
¿Prefieres disfrutar de tu comida al aire libre? La terraza, equipada con calefacción y mantitas, es el lugar perfecto para relajarte y disfrutar de un momento tranquilo, sin importar el clima.
Servicios a tu medida
Para aquellos que buscan comodidad, La 28 Cantabria ofrece opciones de servicio a domicilio, para llevar y entrega el mismo día. Así, puedes disfrutar de sus delicias donde quieras, cuando quieras. Ya sea que estés de paso o que vivas en el barrio, esta pastelería es una parada obligada.
Con su atención al detalle, productos de alta calidad y un ambiente acogedor, es fácil entender por qué tantos clientes la consideran «su lugar». No pierdas la oportunidad de visitarla y descubrir por ti mismo lo que la hace tan especial.