Si te encuentras en la hermosa localidad de Calella, en la provincia de Barcelona, no puedes dejar de visitar la Pastisseria Solís, situada en el Carrer de la Bruguera, 62. Esta encantadora pastelería, de gestión familiar, ha logrado mantener la esencia de la repostería tradicional, haciendo que cada visita sea una experiencia inolvidable.
Repostería Tradicional y de Alta Calidad
En Pastisseria Solís, cada bocado te transporta a tu infancia. Sus pasteles y pastas son como los de antaño, con ese sabor auténtico que es difícil de encontrar hoy en día. Las «saras» son un verdadero deleite para el paladar, y sus pasteles de crema y chocolate no se quedan atrás. Es un lugar que te invita a revivir esos momentos dulces de tu niñez.
Un Negocio Familiar con un Toque Personal
El ambiente en Pastisseria Solís es acogedor y cercano, gracias a su gestión familiar. Los propietarios son conocidos por su cordialidad y trato amable, haciendo que cada cliente se sienta como en casa. Es el tipo de negocio que nos recuerda la importancia del trato personal en los pequeños comercios, algo que se está perdiendo en la era moderna.
Variedad de Productos y Servicios
Además de su deliciosa repostería, Pastisseria Solís ofrece una amplia gama de productos y servicios que se adaptan a tus necesidades. Puedes optar por la compra en tienda si prefieres elegir personalmente tus delicias, o bien optar por el servicio para llevar si estás de paso. ¿No puedes acercarte? No hay problema, también cuentan con entrega el mismo día para que disfrutes de sus productos sin moverte de casa.
Un Clásico de Siempre en Calella
A pesar de algunos comentarios negativos sobre el trato del personal, muchas personas siguen elogiando la calidad de los productos y el ambiente familiar de la pastelería. Es un clásico de Calella que ha mantenido su calidad a lo largo de los años. Si eres amante de los pasteles de crema, no puedes perderte una visita a este lugar.
Aunque algunos clientes han tenido experiencias menos agradables, la mayoría destaca la alta calidad de sus productos y el trato cordial de sus propietarios. Así que, ¿por qué no darle una oportunidad y disfrutar de un delicioso pastel?