La Pastelería Ana Mari Café es una joya en el corazón de Aguilar de Campoo, situada en la emblemática Plaza de España, 7. Este encantador establecimiento combina a la perfección la tradición con un toque moderno, ofreciendo una experiencia única para los amantes del buen café y los dulces de calidad.
Un rincón para disfrutar
Desde su reciente reforma, la Pastelería Ana Mari Café se ha convertido en el lugar perfecto para disfrutar de una pausa relajante. Con su acogedora terraza, se puede disfrutar de vistas impresionantes de la Colegiata San Miguel. Ya sea que prefieras una infusión, un café bien preparado o una cervecita fresca, este es el sitio ideal para desconectar.
Si te apetece algo para llevar, su servicio «para llevar» te permite disfrutar de sus delicias en cualquier lugar. La opción de «comer allí» también es fantástica, especialmente si quieres sentarte y relajarte mientras degustas sus exquisitos productos.
Delicias que no te puedes perder
La Pastelería Ana Mari Café es famosa por sus sfogliatella de pistacho, consideradas por muchos como las mejores que han probado. Si eres amante de la crema de pistacho, este es un destino imperdible, ¡seguro que volverás para llevarte una bolsa!
Otro de sus puntos fuertes es la crema pastelera, que acompaña a la perfección al café de merienda, con un tamaño, sabor y textura impecables. Sus pasteles, hojaldres y natas son simplemente espectaculares. De hecho, algunos clientes afirman que sus pasteles de nata superan a los de Portugal y Bilbao.
Atención al cliente y ambiente
El ambiente en la Pastelería Ana Mari Café es acogedor y tranquilo, perfecto para charlar mientras disfrutas de tus dulces favoritos. La atención al cliente es de primera, con un personal amable siempre dispuesto a hacer tu visita lo más agradable posible.
Aunque algunos clientes han mencionado que las natas podrían no ser exactamente como las de Belén, la mayoría coincide en que la calidad de sus productos es sobresaliente. La pastelería también ofrece una variedad de opciones, desde palmeras, trenzas y napolitanas, todas riquísimas.
Un pequeño detalle a tener en cuenta es que no aceptan pagos con tarjeta de crédito, algo poco común hoy en día, pero que no resta valor a la experiencia general.
Con su excelente ubicación, deliciosos productos y un servicio inmejorable, es el sitio perfecto para disfrutar de un buen café y unos dulces inolvidables. ¡No te lo pierdas!