4.5
- Pl. Cruz, 2, 33180 Noreña, Asturias
- "Hace dos semanas mi marido compró un carbayón. Una bandeja llena de relucientes carbayones, qué desilusión al llegar a casa y ver el destartalado pastel. Hoy, 13 h, sólo 5 clientes esperando, bien, pensé, 20 minutos de espera. La única dependienta tiene animadas conversaciones con los clientes más típicas de un bar o una peluquería. Las cestas, donde deberían estar las suculentas barras de pan, vacías. Cada vez que un cliente pide pan, la dependienta desaparece, no sé muy bien si ella misma amasa, da forma y hornea el pan o es que la parte trasera es infinita. Cuando, por fin, puedo pedir mi cuarto ancho, la dependienta cambia su sonrisa de dicharachera a astuta mientras muestra una arqueada barra, que me recordó a un garfio. Entonces, pido un medio, nada no queda nada de pan. Recuerdo que al cliente anterior le había dicho que si no se arreglaba con las dos barras que llevaba podía venir a por más. Quizás a la dependienta le resulte desagrable, pero yo voy a comprar el pan, no a hacer amigos. No voy a comprar lo que a otros clientes no vende. No es de recibo que habitualmente no haya pan a media mañana tratándose de una panadería. Han perdido un cliente, y con esa actitud perderán muchos más."