Si estás buscando una panadería con auténtico encanto en Madrid, no puedes dejar de visitar el Horno San Miguel. Situado en la calle de Abtao, 16, en el barrio de Retiro, este establecimiento se ha ganado un lugar especial en el corazón de muchos vecinos y visitantes.
Productos de calidad que te transportan a otra época
Desde el momento en que entras en el Horno San Miguel, te envuelve un aroma irresistible que te transporta a otra época. El pan, elaborado con esmero, es siempre fresco y delicioso. La variedad de panes incluye opciones como el pan de espelta, que ha recibido elogios por su sabor y textura.
Además de los panes, la panadería ofrece una amplia gama de productos que no te puedes perder. Las palmeritas, tanto grandes como pequeñas, son un éxito rotundo, aunque algunos clientes han mencionado que pueden ser un poco caras. Sin embargo, la calidad de estos dulces justifica su precio.
Delicias irresistibles para cualquier ocasión
Si tienes un evento especial, el Horno San Miguel es tu mejor aliado. Las palmeras integrales, las de chocolate y las bayonesas han sido un éxito en más de una ocasión. También destacan la empanada de salmón y el bizcocho de almendras, que algunos clientes describen como «espectacular». ¿Te gustan las torrijas? Aquí encontrarás unas de las mejores de la zona.
Un servicio con encanto, pero con margen de mejora
Aunque la calidad de los productos es indiscutible, algunos clientes han señalado ciertos aspectos a mejorar. Uno de los puntos más repetidos es la ausencia de un sistema de tickets. Esto puede generar incertidumbre sobre los precios y la exactitud de las cuentas. Sin embargo, el personal siempre se muestra amable y dispuesto a ayudar.
Otro aspecto a tener en cuenta es que, en ocasiones, puede estar cerrado a pesar de que los horarios indiquen lo contrario. Esto ha causado cierta desilusión en algunos visitantes, especialmente durante los días festivos.
¿Vale la pena visitar el Horno San Miguel?
Aunque hay aspectos que podrían mejorarse, como la transparencia en los precios y los horarios de apertura, la experiencia general es positiva. Si buscas una panadería tradicional en Madrid, este es un lugar que merece la pena visitar.
No dudes en pasar por allí, disfrutar de sus delicias y transportarte a otra época con cada bocado. ¡Seguro que volverás!