Ubicada en el corazón de la Provincia de Ourense, en la dirección Calle Faramontaos, 0 S N, 32141, se encuentra la encantadora panadería Forno Do Carlos. Este es un lugar que no solo deleita con su Pan de Cea, sino que también ofrece una experiencia única para los amantes del buen pan.
Un aroma irresistible
Desde el momento en que se cruza la puerta de Forno Do Carlos, el olor a pan recién horneado cautiva los sentidos. Este establecimiento es famoso por su Pan de Cea, conocido por su gruesa corteza y su sabor inigualable. No es raro ver a clientes desviarse de su ruta solo para llevarse una hogaza de este delicioso pan, que se vende en grandes piezas de más de 1 kg por solo 3€.
Calidad y tradición
Lo que hace especial al Pan de Cea de Forno Do Carlos es su método de elaboración, siguiendo recetas ancestrales que han sido transmitidas de generación en generación. Este es un pan natural, con un alto contenido de proteínas (12g por cada 100g), que puede conservarse durante varios días sin perder sus propiedades. Es una auténtica joya gastronómica que cualquiera que visite Galicia debería probar.
Más que solo pan
Además del emblemático Pan de Cea, Forno Do Carlos también ofrece otras delicias como empanadas y pizzas hechas con masa de pan, que deben encargarse previamente. Estos productos son altamente recomendados por su calidad y sabor. Y si te dejas caer por allí de forma improvisada, siempre encontrarás galletas y bizcochos recién horneados para llevar.
Una experiencia acogedora
El trato en Forno Do Carlos es otro de sus puntos fuertes. Los dueños son muy amables y están dispuestos a mostrarte los hornos y explicarte el proceso de elaboración del pan, lo cual añade un toque personal y acogedor a la visita. A pesar de que la panadería está situada en una casa particular, la calidez del servicio hace que uno se sienta como en casa.
Cómo llegar y recomendaciones
Para aquellos que planean visitar Forno Do Carlos, es recomendable hacer un pequeño desvío desde la autopista y estar atentos a los detalles del lugar, ya que puede resultar un poco complicado de encontrar al estar en una finca cerrada. Sin embargo, la experiencia y los productos valen totalmente la pena. Y si planeas probar sus empanadas o pizzas, no olvides llamarlos con antelación para hacer tu encargo.
Con su pan de Cea, su ambiente acogedor y su excelente atención al cliente, esta panadería es una joya que no querrás perderte.